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sábado, 2 de febrero de 2013

Sexting. Qué es cómo prevenirlo


Sexting es la difusión o publicación de material de contenido sexual, producidos por el remitente, a través de medios tecnológicos.
El uso de móviles es mayoritario entre adolescentes, más a mayor edad. Casi todos ellos hacen fotografías con sus móviles, y un quinto sube ese contenido a internet.
El 65% de las chicas adolescentes estadounidenses y el 35% de los chicos ha enviado sexting.
¿Por qué lo hacen?
Porque alguien se lo pide.
Para coquetear.
Por diversión.
Para autoafirmarse.
No es que sólo los adolescentes hagan sexting...también se da entre los adultos. Pero tiene diferentes connotaciones según la franja de edad, desde el punto de vista jurídico incluso, al ser menores de edad.

Al 60% de los padres les parece igual de mal que sus hijos envíen o reciban sexting.

No es lo mismo sexual que atrevido: no es sexting el envío de imágenes en actitud sugerente pero sin un claro contenido sexual. Aunque a veces no es fácil distinguir donde empieza una y donde termina la otra...
 La definición sexual y la presión del grupo son importantes de cara a la necesidad de pertenencia. Eso, junto con una adolescencia cada vez más adelantada, sobre todo en las niñas, son otros factores que influyen.
El problema consiste en la situación de vulnerabilidad a la que el mismo adolescente se expone, inconsciente de la exposición de su intimidad, de la falta de seguridad y el riesgo de la difusión masiva de su privacidad; por falta de experiencia y exceso de confianza no valoran suficientemente los riesgos de que ese material salga del ámbito privado.
Empeora la situación cuando el adolescente es el experto tecnológico en su hogar, con lo que se supervalora en cuanto a su capacidad de control sobre cualquier situación de internet, y además, no tiene a nadie a quien consultar o en quien apoyarse en caso de problemas.

 Problemas, que pueden ser:

pérdida de la privacidad
exposición pública de su intimidad a su entorno
ciberacoso (acoso entre iguales por medios tecnológicos)
sextorsión (chantaje al protagonista de las imágenes)
grooming (estrategias realizadas por un adulto para conseguir la confianza del menor y así sus concesiones sexuales)
riesgos físicos por exposición a pederastas, o en el caso de grooming, y el riesgo de geolocalización, por imégenes identificativas o geoetiquetado en la red.

Las implicaciones jurídicas son serias y variadas, y salpican igualmente a difusores y receptores de sexting, por tenencia de material relacionado con pornografía infantil, y delitos contra la imagen y la  intimidad y la libertad sexual. En el otro lado, por parte del creador del material se puede incurrir en delito de exhibicionismo, tipificado igualmente en el Código Penal.
En España el sexting no está tipificado como tal como delito, como vemos, por lo que hay que recurrir a otras figuras legales.
Es importante tener en cuenta el factor edad: entre los 14 y los 18 años, al infractor se le aplica la Ley del Menor, con condenas de severidad variable, acorde con la gravedad del delito.
En nuestra legislación, se consideran los 13 años la edad mínima de consentimiento sexual, por debajo de la cual todo supuesto consentimiento se considera nulo, y fruto de la violencia o abuso.

¿Qué hacer?
Prevenir siempre que sea posible. Con información, con la creación de un clima de confianza que favorezca que el adolescente solicite ayuda de un adulto en caso de problemas.

Evitar que el adolescente pague solo la factura de su móvil, de forma que tenga una falsa sensación de autonomía, madurez y control. Practican sexting conco veces más éstos, que los adolescentes que pagan parcialmente sus facturas telefónicas.

Ubicar el ordenador en una habitación de uso común de la casa, evitando el uso de la webcam en la privacidad del dormitorio del menor.

Utilizar los sistemas disponibles de control parental para limitar e informar del uso que el adolescente hace del ordenador.

Consejos para adolescentes

Piensa antes de publicar, Después no hay marcha atrás.
Conoce la privacidad y la seguridad de tu dispositivo y de la red en la que te mueves.
No ceder ante la presión o el chantaje.
No participar en el sexting ni creando, ni reenviando, ni fomentando.



Si descubres que hace sexting

Lo primero es transmitirle la importancia de los riesgos que corre, la seriedad de las consecuencias de esa conducta.

Por otro lado, intentar la eliminación del contenido a través de comunicación con los desarrolladores del sitio web donde están alojados, si es necesario a través de la Agencia Española de Protección de Datos.

Para el apoyo psicológico es fundamental acudir a un profesional. Lo va a necesitar, van a ser circunstancias de mucha presión.

En caso de que alguna de las conductas haya supuesto la comisión de un delito, denunciar es fundamental. Se hace ante:
la Policía Nacional, a la Brigada de Investigación Tecnológica
o ante la Guardia Civil, al Grupo de Delitos Telemáticos.

Enlaces de interés

 http://cert.inteco.es/Proteccion/Menores_protegidos/
• http://ciberdelitos.blogspot.com/
• http://observatorio.inteco.es
• http://www.cuidadoconlawebcam.com
• http://www.cuidatuimagenonline.com/
• http://www.e-legales.net/
• http://www.osi.es
• http://pantallasamigas.net
• http://www.sexting.es/
• http://www.sextorsion.es/
• http://www.stop-sexting.info/


Espero que haya resultado de utilidad.



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